jueves, 18 de febrero de 2010

De hierro, no!

y es por eso que no soy de hierro, solo soy una mujer refugiada en los brazo de su padre

yo soy como David
cagandola, pero adorando a Dios, reconociendole lo malo q hago, humillandome ante el
y recibiendo sabiamente su consuelo y fortaleza
por eso recibo su bendicion
porq soy una mujer bendecida
si no fuera asi, no tuviera el cariño de muchos
creo q es la mejor bendicion
tengo mi casa
mi comida, me visto
y las dificultades y remesones que da la vida
 son solo eso
un despertar para recordarte que el mundo fuera de tu padre es perverso, malo y traicionero